viernes, 8 de abril de 2011

VIDA DE FAMILIA XXI

RESPONSABILIDADES BÍBLICAS DEL ESPOSO

VII - PADRE QUE ENSEÑA E INSTRUYE


SER PADRE Y MAESTRO DEMANDA: ENSEÑANZA O INSTRUCCIÓN

El primer mandamiento que Dios les dio a Adán y a Eva fue: “...fructificad y multiplicaos; llenad la tierra” (Gn. 1:28).

Desde este momento, la paternidad ha sido esencial en la vida del esposo, y ha sido fuente de gran bendición a aquellos hombres que han tomado con seriedad su papel.

Aunque la filosofía del mundo lleva a no aceptar esta responsabilidad, en el corazón de un creyente debe permanecer las palabras del salmista en Salmos 127:3-5: “He aquí, herencia a Jehová son los hijos; cosa de estima el fruto del vientre. Como saetas en mano del valiente, así son los hijos habidos en la juventud. Bienaventurado el hombre que lleno su aljaba de ellos; no será avergonzado cuando hablare con los enemigos en la puerta”.

El padre controlado por el Espíritu obedece Efesios 6:4, el cual dice: “Y vosotros, padres, no provoquéis a ira a vuestros hijos, sino criadlos en disciplina y amonestación del Señor”.

ENSEÑAR es INSTRUIR según nos dice Proverbios 22:6: “Instruye al niño en su camino, y aun cuando fuere viejo no se apartará de él”.

INSTRUIR, es la responsabilidad que tenemos de llevar a nuestros hijos al conocimiento y aplicación de la Palabra de Dios, moldeándolos a través de la enseñanza y el ejemplo como nos enseña Deuteronomio 6:4-9.

Analicemos el reto que tenemos por delante bajo el siguiente bosquejo:

I.     LA EFECTIVIDAD DE LA ENSEÑANZA
II.    LA APLICACIÓN DE LA ENSEÑANZA
III.   TIPOS DE NIÑOS QUE ENSEÑAMOS


I. LA EFECTIVIDAD DE LA ENSEÑANZA

            Vendrá cuando, usted como padre, la apoye por su ejemplo. Esta efectividad será evidenciada por medio de estas destrezas de sabiduría y discernimiento:

A.    HABILIDAD PARA DISTINGUIR ENTRE:

1.            HECHOS Y OPINIONES: Es importante que todo padre cristiano que se involucra en el proceso de la enseñanza y la instrucción, sepa distinguir con sabiduría entre los hechos y las opiniones. No es lo mismo evaluar un hecho, que evaluar una opinión, o hacer algo u opinar sobre algo. Por ejemplo en algún momento de nuestra vida podemos tener una opinión sobre algo y cambiarla, pero cuando hacemos algo no podemos echar hacia atrás.

2.            VERDAD Y FICCIÓN: También es sumamente necesario buscar sabiduría para poder distinguir entre lo que es verdad y es ficción; principalmente en un mundo como es el que nos ha tocado vivir, en el cual a través de los diferentes medios de comunicación; así como de la multitud de filosofías y teorías se ha querido confundir la verdad con la ficción. Por ejemplo tenemos el tema de la ciencia ficción la cual ha llevado aún a muchos cristianos a considerar la existencia de seres extraterrestres, o de dar crédito a teorías como la teoría de la evolución.

3.            CAUSA Y EFECTO: Otro punto importante en el proceso de la enseñanza, es saber distinguir con sabiduría la diferencia entre causa y efecto. Ciertamente, tenemos que reconocer que hay mucha confusión en distinguir sobre estos dos aspectos que ahora estudiamos. Por ejemplo en el área de la salvación tenemos que LA OBRA DE JESUCRISTO EN LA CRUZ DEL CALVARIO es la causa de nuestra salvación, y el poder que tenemos de su Espíritu que nos ayuda a transformar nuestra vida pecaminosa en una vida de santidad es el efecto de la causa que es CRISTO.

      B.      HABILIDAD PARA DIAGNOSTICAR LOS PROBLEMAS Y BUSCARLES SOLUCIONES

1.            Todo padre cristiano tiene que aprender a saber como diagnosticar los problemas que entran a su vida y a la vida de sus hijos de manera acertada.

2.            No solamente el padre cristiano debe saber diagnosticar los problemas que se presenten a su vida sino que debe saber también formular las soluciones apropiadas para resolver los problemas diagnosticados.

3.            Es penoso ciertamente saber cuantos padres existen en el mundo ejerciendo el rol de maestro y no saben ni mucho menos tienen idea de lo que significa diagnosticar y mucho menos tienen la sabiduría para buscarles soluciones apropiadas, llevando a sus familias por senderos oscuros y dolorosos.

C.    HABILIDAD PARA DISCERNIR ESPIRITUALMENTE

Esta habilidad consiste en establecer en nuestras vidas LOS VALORES BÍBLICOS y ESPIRITUALES apropiados para vivir por ellos; al igual que poder establecer LOS VALORES BÍBLICOS ESPIRITUALES ÉTICOS apropiados.

1.            VALORES BÍBLICOS Y ESPIRITUALES

a.  Evaluar las cosas eternas frente a las pasajeras o temporales (2 Co. 4:18).

b.  Evaluar el deseo de criticar o disminuir a los demás (Ef. 4:29).

c.   Evaluar lo que es agradable a Dios y lo que es agradable a los demás para nuestras propias vidas (Fil. 2:3).

d.  Evaluar una oposición activa a la maldad y una posición diligente hacia la bondad (Gá. 6:3-10).
                       
2.      VALORES BÍBLICOS Y ESPIRITUALES ÉTICOS

a.  Tratar a aquellos con los que vivo y trabajo con respeto y honor, teniendo cortesía y preocupación por ellos.

b.  Trabajar todo el tiempo por el dinero que recibimos, no queriendo ganar más con menos esfuerzo.

c.   Ver la calidad y cantidad de mi trabajo como algo primario que refleje mi creencia en Cristo, siendo un obrero serio y diligente.

d.  Habilidad para poder lograr una vida personal devota, buscando la santidad de mi alma. Todo cristiano sabio, es aquel que ora, lee la Palabra buscando la voz de Dios, anda en el Espíritu y pone al servicio de la iglesia los dones que ha recibido del Espíritu Santo.

e.   Habilidad en la dedicación al servicio a Dios y a los demás.

f.     Habilidad para crecer diariamente, sabiendo que solos no tenemos esta capacidad sino dependemos totalmente de Dios.

g.  Procura una relación interpersonal con otros, evangelizado al perdido y edificado al creyente.
             
o  2 Timoteo 2:15 - Nos muestra la INSTRUCCIÓN.

o  2 Timoteo 3:17 - Nos muestra la APLICACIÓN.


II. LA APLICACIÓN DE LA ENSEÑANZA

ENSÉÑELES:
                       
A.     A tomar el camino que deben seguir y no el camino que ellos seguirán.

B.      Con toda ternura, afecto y paciencia.

C.     Persuadiéndolos constantemente a que ellos dependan de usted como su autoridad.

D.      Con un pensamiento claro. El alma de sus hijos es lo más importante.

E.      A conocer la Biblia y a depender de ella como su única regla de fe y práctica.

F.      El hábito de orar.

G.     El hábito de congregarse y de trabajar en la obra.

H.      El hábito de la fe.

I.       El hábito de la obediencia.

J.      El hábito de hablar siempre la VERDAD aunque esto traiga consecuencias, para él, negativas.

K.      El hábito de redimir el tiempo.

L.       El temor constante a la sobre-indulgencia; para que no oculten sus faltas.

M.     A recordar constantemente cómo Dios instruye a sus hijos.

N.     A recordar siempre la influencia de su propio ejemplo.

O.     A recordar siempre el poder del pecado.

P.      A recordar siempre las promesas de Dios en su Palabra.

Q.     A ser agradecidos a Dios, por lo que son y por lo que tienen.


III. TIPOS DE NIÑOS QUE ENSEÑAMOS

A.    NIÑOS FÁCILES

1.            Estos son niños adaptables a todo desde su nacimiento; son niños que aparentemente son fáciles de instruir; pero que necesitan también atención y cariño.

2.            Los padres de estos niños generalmente cometen con ellos grandes errores porque piensan que como son niños obedientes y fáciles de enseñar no tienen que invertir tiempo en ellos, porque estos aprenderán solos.

3.            Verdaderamente que estos niños, por su temperamento o por las circunstancias que le rodean así como por otras causas son considerados como niños fáciles de educar, pero creo que cada niño debe sentir que sus padres se interesan por él y que para ellos él es importante.

B.    NIÑOS DE REACCIÓN LENTA

1.            Son niños que con dedicación, amor y paciencia después de un tiempo de dificultad y contrariedad llegan a adaptarse a la instrucción.

2.            Este tipo de niños requieren mucho más tiempo de enseñanza de sus padres y es importante entender como padres que estos niños son niños especiales y como niños especiales tenemos que instruirlos.

3.            Con esto no queremos decir que debemos sobreproteger a estos niños, sino por el contrario estos niños deben ser tratados con toda normalidad, pero si sabiendo nosotros como padres que tenemos que instruirles con mayor cuidado.

C.    NIÑOS DIFÍCILES

1.            Es el niño negativo e impredecible, necesita frecuentemente, cuidado, atención y corrección, además de un estudio de las causas que originan sus efectos negativos por lo cual les llamamos niños difíciles.

2.            Estos niños se consideran siempre como niños insoportables y aún sus propios padres no quieren someterse al reto que significa educar e instruir a estos hijos.

3.            Verdaderamente que los niños difíciles son niños que necesitan de mucha paciencia y conciencia de sus padres, así como de preparación de los mismos en cuanto al trato con que estos niños deben ser mantenidos dentro del proceso de instrucción, ya que son muchas las personas que rodean a estos niños que pensando que con su trato le hacen bien por el contrario le infringen mucho daño.
                                   
CONCLUSIÓN Y APLICACIÓN:
La tarea de educar no es fácil, ni rápida; demanda sacrificio, dedicación y todo el tiempo del mundo que sea posible invertir en la vida de nuestros hijos.

Recuerde que si usted no enseña, otros le enseñaran en su hogar lo que tal vez usted con el tiempo entenderá, será su gran error.

LUCHE POR ESTO.


                                                                                                  

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